
Lo más cómodo y recomendable para el bebé, es colocarlo de costado, con todo el cuerpito frende al pecho de mamá, se debe sujetar firmemente al pequeño o pequeña de manera que su cabeza quede apoyada en el antebrazo y se debe evitar a toda costa que el cuerpo del bebé se encorve.
Al sujetar a nuestro hijo o hija, se debe ser firme pero cuidadoso al mismo tiempo, está bien abrazarlo pero sin apretujarlo...